Sólo nada el nadador, porque nunca nada el suicida.
Sol o nada es su elección en el océano de seres.
O sea, no quiere ser ese que es.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Regalo de Navidad

Ya hice mi pedido de regalo a Papa Noel. En realidad, se lo hice a mi ángel de la guarda para que proceda con los trámites adecuados. Sé que él puede conseguir mi regalo y hoy cuando abra la puerta de mi dpto. va a estar junto al pesebre, espiritualmente hablando.
¿Sabés qué es lo que pedí? Tirá ideas, quizás aciertes.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Navidad en pequeño

Con una decoración minimalista, recibo esta Navidad en un año que me ha deparado una sorpresa tras otra.
Fue un año sumamente intenso y estoy convencida de que siguen emociones más fuertes todavía. Si bien el 2010 termina, el 11 aparece sugerente e imprevisible (algo que me cuesta asumir, ya que lo no pre visible me descoloca).
Amanezco cada mañana con los ojos de Doris y me divierto.
FELIZ NAVIDAD Y AÑO NUEVO PARA TODOS.

martes, 21 de diciembre de 2010

Hacia mí


Últimamente estoy altamente combustible. Un roce, algo que no es nada, y ya me desparramo por el suelo. Las piernas se me aflojan y los pensamientos vuelan.

Trato de controlarme y es imposible, sale fuera de todo razonamiento y se escurre como vertiente y yo quieta sin poder tomar ninguna acción precisa.

Y ahí estoy... sin poder dominarme.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Danza entre rojos sueños


Estaba automatizada por el trabajo e insensibilizada de emociones.
De repente la música surgió de la radio. Era un tema antiguo, de recuerdos... y su cuerpo se acordó del movimiento, su corazón comenzó a latir cuando sintió el golpeteo de los tambores.
Primero fueron pasos indecisos que se convirtieron en inquietos. El ritmo la empujó a deslizarse por el suelo. Se sacudió la inercia y elaboró su vuelo matinal. Aceleración de melodías y su mente se desenfrenó. Había vuelto a adquirir su libertad privada de bailes indescifrables, de canciones susurradas en sortilegios.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Humillada y en huida


Pensó en dejarse caer. Sus brazos mantenían la distancia entre su cara y el barro. Temblaban ante la furia y la impotencia. En esos segundos decidió que no iba a permitir que la estupidez que había cometido en el ataque destruyera todo lo que había conseguido.
Siempre había fantaseado en dejarse morir en combate, pero tolerar que un cobarde la asesinara por la espalda no era una opción viable.
En otras guerras había recibido heridas mortales y las había afrontado; ésta no iba a ser diferente. No tenía armas; sólo le quedaba huir. Quiso rechazar la idea, pero si se quedaba, su cuerpo sería descuartizado por la salvaje espada que ya sentía vibrando en el aire.
Comenzó a tararear una canción antigua, tomó impulso, giró hacia un costado, mientras su pierna izquierda trababa al otro guerrero, se levantó con presteza y desapareció en la selva de granito vegetal.
Humillada por sí misma, siguió caminando, como siempre lo había hecho.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Rosa salvaje


Él entró en su casa diciendo que se había perdido. Sólo necesitaba un teléfono para hacer una llamada. Vio su sonrisa honesta y le creyó (luego supo que la honestidad no era una cualidad inherente de la boca y todo lo que uno ve puede ser falso).
Mientras se dirigía a la cocina (iba a ofrecerle un café), sintió un fuerte golpe en la cabeza, sus piernas se aflojaron y su conciencia se fue cayendo hacia el suelo.
Cuando volvió en sí, se encontró con el torso del hombre sobre su cara y sus movimientos en frenesí golpeaban su cuerpo reventado, en tanto su respiración vehemente hacía caer un líquido corrosivo; cada gota de sudor que la mojaba penetraba a través de su olfato en una sensación de arcadas que no podía ejecutar por la presión sobre su pecho.
Exhausta sobre la cama, era una masa informe que a duras penas podía oxigenarse. Casi en tinieblas percibió que la trasladaba. Fue depositada en la bañera llena y mientras ella se deslizaba hacia el fondo, el agua adquiría un tono violáceo.
Así la encontraron, rodeada de rosas salvajes que flotaban y se enredaban entre su pelo oscuro.
Tomando como base el tema de Nick Cave y Kylie Minogue

sábado, 23 de octubre de 2010

Ella y su muñeca

La llevaba de la mano a caminar por la vereda. Se sentaban juntas en el escalón de entrada. La mecía en sus brazos para que dejara de llorar. Era su pequeña hija de ojazos satinados.
A veces a la noche la veía en la silla, que la miraba con las pupilas grandes. Era su ángel de la guarda que la cuidaba mientras dormía.
Un día jugando en la plaza, se enojó y la tiró contra un árbol. En seguida fue a levantarla y trató de arreglarla. Estaba un poco sucia y un rayón cruzaba su mejilla derecha.
Esa noche no quiso mirarla antes de dormirse, podía percibir de reojo la mirada dura y fría. Durante el sueño tuvo la sensación de que le faltaba el aire, como si algo le succionara su espíritu. Cuando se despertó a la mañana siguiente, comprobó que estaba en la silla de su escritorio y que no podía moverse.

sábado, 2 de octubre de 2010

Amor ahogado

Pensó que el amor no existía. Siempre creyó que ese sentimiento era una expresión de un acto físico. El sentirse penetrada era una invasión que permitía, para incorporar al otro. Sólo se trataba de un control, sobre todo de sus emociones. Gemía y se distendía de placer sin entregar una gota de alma. Durante todo el proceso, era ella la que existía.
Y ahora su vagina se abría sin ser tocada. Los susurros del viento hacían que se inundara su río interior y que fluyera hacia afuera en un afluente sobre sus nalgas, mientras una electricidad se descargaba sobre su piel. Seguía siendo una manifestación corporal, que aturdía su cabeza.

jueves, 30 de septiembre de 2010

Sillones presidenciales vacíos

Esta vez no fue "Con los ojos tapados". La noche del 28 de junio de 2009 otro presidente había sido secuestrado y asesinado por fuerzas pseudonacionales (en realidad, tropas de una empresa gubernamental extranjera). Conocía ese antecedente y él no iba a permitir ese desalojo.
Cuando lo encararon en la calle, supo que la bala de goma no había sido accidental. Fue una advertencia. Y eso lo envalentó más.
Logra escuchar los gritos del pueblo que llegan del exterior desde que se asomó a la ventana y dijo: ¡Tengan cojones y carguen con un magnicidio! Con la camisa desabrochada se sentó en el sillón presidencial y esperó. Sigue esperando, mientras escucha el griterío, la balacera, los golpes... Sigue sentado al imaginarse los cuerpos civiles en el suelo, la sangre...
Se sobresalta con la puerta que se abre de golpe, pero mantiene la postura. Como presidente o como cadáver.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Y fue ella

Sintió el frío que cruzaba su espalda. Sólo tuvo tiempo para girar la cabeza y ver, por un instante, los ojos de su hermana, mientras caía en el piso también helado. No consiguió elaborar un pensamiento, por lo que su pregunta quedó impresa en su mirada fija.
En el puñal no había rastros de sangre ni las baldosas quedaron teñidas de rojo. La sangre quedó en el cuerpo para mantener la vitalidad del interior avasallado y carcomido por la ira ajena.

jueves, 26 de agosto de 2010

Tiempos blancos

Ya no sé dónde se escondió ese estremecimiento que me invadía cada vez que te miraba a los ojos.
Ya no recuerdo cómo recorrer tu cuerpo con los ojos cerrados para ser invadida por ansias febriles.
Ya no existen sentimientos ni sensaciones plenas.
He quedado vacía sobre la cama.
Son olvidos de muchos cuerpos sin nombres, sin rostros, sin pensamientos, sin almas.
Son presencias que estallan en mi cabeza cuando quiero dormir y se escapan por la puerta entreabierta para merodear por calles inciertas o viajar en vagones vacíos de existencia.

sábado, 5 de junio de 2010

Poco a poco


Cada momento es un paso más allá de mí. En pequeñas cosas vuelvo a reintegrarme y a sentir que estoy en mi propio lugar de libertad, donde los otros son ellos que necesito lo más lejos posible.

sábado, 22 de mayo de 2010

Bajo la tierra

Siento frío, Heathchiff. ¿Podrías abrazarme? Necesito tu calor, preciso tu protección. Me encuentro sola bajo la tormenta y la oscuridad no me deja verte.
Anoche soñé que mi cuerpo se hundía en el barro del cementerio y que poco a poco iba perdiendo su consistencia, en tanto mi espíritu te buscaba en los rincones de Cumbres porque eras mi asesino.
Sé que desde que te casaste con Isabella una nube tóxica entró en mis pulmones y empecé a respirar un aire rancio que fue pudriendo mis órganos vitales, pero todavía estoy viva. Mi corazón late con fuerza pensando en vos y un cosquilleo me impele a tocarte. Si estuviera muerta, vos estarías conmigo; tu alma me pertenece, puede separarse de tu cuerpo, pero no de mí.
¿Estás ahí? Puedo escuchar tus bufidos. Ahora cuando la luna se asome, podré contemplar tu rostro. Entonces buscaré tu boca para mordisquear tus labios y para que tu lengua me penetre con frenesí, como antes, como siempre.
Ahí estás. Una lágrima surca la tierra que se secó en tu mejilla. Extiendo mi mano para levantar tu mentón. Sin embargo, mis dedos no encuentran ninguna resistencia, sólo consiguen deslizarse en el aire. ¿Estoy soñando?

martes, 13 de abril de 2010

Medea sentada entre las tumbas

Soy la hiel que recorre el cuerpo de Jasón y que atraviesa sus venas llenas de fluidos agrios y pesarosos.
Soy la venganza que se escurre entre la sangre de los cuchillazos que horadan los cuerpos de mis pequeños.
Soy la furia que se desata ante la traición y me devuelve mi esencia hechicera.
Soy como siempre, la que acapara las miradas y cuyas pociones mitigan dolores o devuelven la dignidad de cada elemento natural.
Medea es mi nombre, y ante él se inclinan reyes, embajadores y dioses. Acá estoy, envuelta con el sudario de mis hijos, sentada junto a ellos, que yacen inertes sobre un suelo extranjero.

sábado, 10 de abril de 2010

¿Con qué derecho?

Siempre supe que mi papá se había suicidado. Incluso cuando era chico mis compañeros del colegio me decían que lo había hecho para librarse de mí, que había preferido la muerte antes que volver a ver mi cara fea otra vez.
En la adolescencia me enteré de que su suicidio había sido producto de un trastorno psiquiátrico y que podía estar latente en mí a través de la herencia.
La evidencia de mi enfermedad la tuve la primera vez que sentí la necesidad de tirarme a las vías ante la llegada del tren. No estaba deprimido ni era especialmente infeliz; sólo estaba esperando en el ánden y mi cuerpo tuvo una reacción instintiva. Era como si la cercanía de la locomotora implicara que debía darle la bienvenida.
Por suerte, mi yo racional tuvo mayor fuerza y mi cerebro hizo que me agarrara férreamente al alambrado que estaba a mis espaldas; de esa forma, los alambres impieron que mi cuerpo se cayera delante del tren.
Así, consciente de la existencia de este suicida dentro de mí, comencé a estar pendiente de sus acciones y a tratar de salvarle la vida cada vez. Fue todo un éxito. Por eso acá estoy con un arma apuntando al interior de mi boca. Ahora me surge una duda: ¿cuál de los dos tiene dominio sobre mi mano derecha?

Gracias por hacerme leer San Manuel Bueno, mártir

viernes, 9 de abril de 2010

Tonight

When I woke up this morning, I couldn't believe that I was there, in this bed. Then I turned my head to the left and my eyes were opened big, big, like the look of the chicken. My man was laying down on his back and a blood stain was appearing on the sheet.
I touched his cold skin and my hand took a red color. Suddenly I realized that I had a knife in another hand. What did happen when we were sleeping? It's truth that I had a nightmare, but it was only a bad dream. How did knife come to my hand? Why did I kill him?
I can't answer these questions while I watch the white wall.

viernes, 2 de abril de 2010

Detrás de la barricada

Todos los años visito a tu mamá para esta fecha y ella siempre me espera con unos ricos mates y tortas fritas. Al principio la conversación gira en torno a trivialidades, sobre el barrio, el país, la inseguridad o el último chusmerío de la farándula. A medida que se va vaciando la pava, ya cuando los paraguayos empiezan a surgir en el agua, sabemos cuál es el siguiente tema.
Ella comienza a mover la bombilla, como si quisiera arreglar la yerba, no me mira, espera unos segundos y me pregunta: ¿Qué pasó en la barricada?
Otra vez le cuento la misma historia y nos hace bien a los dos; ella comprende que su hijo no murió en vano y yo... agradezco la vida que salvaste en Malvinas.

Entre los olivos

Ya es entrada la noche y estoy en medio del bosque. Siento mis piernas cansadas de caminar, pero sé que si me detengo, no voy a poder volver. También tengo miedo de parar; la oscuridad me envuelve y si dejo de hacer ruido con mis pasos, el silencio me va a traer sonidos amenazantes y engañosos.
Por otro lado, quiero tener mi mente ocupada tratando de distinguir el camino por donde voy. Mis pensamientos deben quedarse en la nada para no sentir la muerte que me sigue. Percibo que mi piel se electriza al contacto con el aire y sé que está ahí. No necesito mirar hacia atrás para ver al ángel oscuro. Todavía quiero andar unos kilómetros más. En cuanto tenga coraje, daré media vuelta para enfrentarla en forma directa.

martes, 23 de marzo de 2010

Mi discurso por el Día de la Memoria

La fecha que hoy conmemoramos surge de una situación histórica que sufrió toda la sociedad argentina.
En la década de 1960 la Argentina se encuentra sumida en el descontento y la inestabilidad política. Aparecen grupos armados tanto de izquierda como de derecha que utilizan el terrorismo como modo de expresión. Esto llega a su apoteosis con el gobierno de Isabel Martínez de Perón, momento en que los partidos opositores buscan a las Fuerzas Armadas para que tomen el poder. Después del derrocamiento del gobierno democrático, asume una Junta Militar que intenta imponer la paz utilizando los mismos métodos que usan los grupos a los cuales quieren sofocar; de esta forma, instauran el Terror de Estado. En el vocabulario común de los argentinos aparecen palabras como desaparecidos, centros clandestinos de detención, hábeas corpus, picana, apropiación de bebés, Ford Falcon verde, entre muchos otros términos.
Ahora bien, ¿qué enseñanza no deja esta fecha tan tenebrosa? El respeto a la vida humana.
Decimos que hoy es el Día de la Memoria. La memoria nos permite traer al presente hechos pasados. ¿Para qué? Para mejorar nuestro presente y nuestro futuro.
Por un lado, podemos analizar los actuales sucesos mundiales de manera analógica con este pasado; por ejemplo, las guerras en Medio Oriente. ¿Es correcto que alguien que obtuvo el premio Nóbel de la Paz esté bombardeando Afganistán, ya que el fin justifica los medios? Esta frase, que condensa el pensamiento de Maquiavelo, también la hicieron suya Mussolini, Hitler, Stalin y Lenin.
Esta eliminación sistemática del otro olvida la individualidad propia de los hombres. Yo sé que existo en la medida en que puedo confrontar mis ideas con las de otra persona que opina diferente a mí. Si todos pensáramos de la misma manera, no sabríamos cuál es nuestro propio pensamiento; seríamos como un cardumen que se mueve como si fuera un solo organismo. Somos copias originales de un ser superior, o de una idea esencial, o de genes hereditarios, o de lo que cada uno considere como el origen del hombre.
Desde hoy y desde nuestro lugar podemos llevar a cabo el respeto a la vida y al otro.
- Cuando manejamos, debemos ser conscientes de que el auto puede ser un arma mortal. Por eso, hay que cumplir las reglamentaciones viales: respetar los semáforos, las franjas blancas, no conducir si se consumieron alcohol o drogas, no usar el celular mientras se maneja… y todas las demás reglas que una persona responsable conoce.
- Como transeúnte, corresponde cumplir otras tantas, como respetar los semáforos, no cruzar por la mitad de la calle, no tirar objetos a los autos.
- Respetar al otro por lo que es. Valorar la integridad física y psíquica: no arrojar elementos contundentes, no humillar, jugar al fútbol sin herir al adversario, no difundir rumores…
Que la memoria nos sirva para mantener presentes los errores pasados y tratar de no cometerlos más, y los éxitos conseguidos para seguir repitiéndolos en el futuro.
También que esta capacidad intelectiva nos permita elaborar un espíritu crítico y, de esta forma, convertirnos en sujetos independientes y dignos de la evolución humana.

lunes, 8 de marzo de 2010

Batalla naval

El almirante acababa de dar la orden. Ya en sus puestos comenzaron los cañonazos.
Mientras apuntaba a la fragata enemiga, podía percibir el mar cabrillear en el plano inferior de su mirada, pero tenía que concentrarse en cargar el cañón. De repente un golpe en proa lo hizo desestabilizar y de refilón llegó a ver un cuerpo que caía al agua. Entre los estruendos no conseguía oír los alaridos, aunque sabía que estaban ahí.
Todavía estaban a cierta distancia; se veían los agujeros en el casco y las formas de los tripulantes en plena corrida. Las órdenes habían sido claras: sólo dejar las chalupas en pie.

sábado, 6 de marzo de 2010

Patitas

Pies dorados engarzados en una cadena, una pata roja y otra azul, dos zapatos holandeses con dibujos en un azul agua, otros pies dorados más toscos, más significativos y una pata de la suerte que en algún momento fue anillo. Todos con una historia distinta van marcando mi existencia.
Diría que mis pies están en el aire y sólo la arcilla permite dejar mis huellas de alguna manera.
Me gustaría seguir las pisadas que hace años grabé en la arena, pero cuando me di vuelta, el mar se las había comido. Mi planta había quedado dibujada en pares que avanzaban con firmeza sobre el suelo fluctuante. Y ya no están. Queda esta pata con forma de cenicero para enlazar esa cadena cuyo dije persiste en su sustancia dorada.
Ahora mis tobillos se mueven para iniciar el baile y bailan.

viernes, 5 de marzo de 2010

Distintos encuentros

A veces el sol toca mi piel y siento cómo se eriza, incluso percibo un cosquilleo que se extiende sobre la superficie y que me gratifica. En esos momentos cierro los ojos unos segundos para poder captar y encerrar esa delicia acariciante que imprime recuerdos en mi retina. Me sosiego y me desvanezco entre besos incansables, entre susurros jadeantes, entre movimientos incipientes. En realidad, soy una planta mecida por manos desconocidas, que gime ante la presencia del calor, que recibe humedad en sus raíces, que tiende su tallo hacia el aire que lo contiene. El agua comienza a deslizarse a través de los estomas y surca por los pliegues naturales. Finalmente, el oxígeno inunda las salidas y sale en explosiones fúlgidas.

martes, 2 de marzo de 2010

En el tiempo

Mientras bailamos, puedo sentir su mano firme en la espalda. Me controla y me lleva.
Su cuerpo avanza hacia el mío, avasalla mi espacio y me dejo ir. Los pies se entreveran y la falda se desliza en el aire siguiendo los movimientos. Arrastro el zapato con delicia hacia el otro que me espera; percibo la sincronía que sella los espacios vacíos.
Las pausas son tensas para explotar en la energía del baile que se desenfrena, en tanto la mente se obnubila y desaparece.

domingo, 14 de febrero de 2010

Mis 40

Primer regalo de cumpleaños. Recién levantada.
Desayuno desde Carlos Paz
. Gracias Paula.


Son mis últimos minutos antes de enfrentar los 40. Todavía tengo muchas cosas pendientes y agradezco tener la posibilidad de realizarlas. ¿Da miedo convertirse en alguien maduro? No, ahora puedo decir que soy una persona desligada de todo (yo me entiendo). Por eso mañana es un día en blanco para llenarlo con millones de cosas nuevas, sobre todo de aquellas que siempre dejo a mitad de camino. Es el momento de completar el círculo.
Me dispongo a aceptar mi imagen guerrera, la que me paraliza por su componente agresivo, para desarrollar la capacidad de planificar mis estrategias y lograr mis objetivos. Sé cuál es la meta y ya no es una abstracción. Acá estoy preparada para comenzar el viaje.
¿Escuchás la voz que aúlla su nombre en el desiero? ¿Sentís las ráfagas que impulsan tu movimiento? ¿Podés observar los detalles de tu mano que se tensa al escribir? ¿Se llena tu boca de una lengua que se dispone a hablar? Olfateás y exhalás para impregnar el mundo con tu esencia.
Acá estamos, vos y yo, la de ayer y la de mañana en un eterno presente.

miércoles, 27 de enero de 2010

Golpea tu cerebro

Atravieso tu cerebro para desgarrar cada idea que surca entre los repliegues de los hemisferios. Puedo sentir tu deseo palpitando en el hipotálamo de la angustia y confundirme en las conexiones axonales que me convierten en un impulso eléctrico sin cuerpo y con mucha fuerza.
El poder letal que encierra la inyección golpea en tus ojos con una luz cegadora, mientras comprendés que ya es tarde para gritar, porque tu boca se cierra en un estertor agónico.
En tanto, dentro de las celdas mitocondriales, mi energía explota en un movimiento centrífugo y deshace todo atisbo de misericordia. Las partes se esparcen sobre la tierra y las alimañas se alimentan con voracidad.
(Texto tomando como inspiración "Hit the lights" de Metallica)


Hit the lights (letra)
No hay vida hasta el cuero / vamos a patear unos culos esta noche / tenemos la locura del metal / cuando nuestros fans comienzan a gritar / está bien, bueno, todo bien / cuando comenzamos a rockear / nunca más queremos parar.
Golpea las luces.
Sabes que nuestros fans son insanos / vamos a hacer volar este lugar / con el volumen más alto / que cualquier cosa hoy, es la única forma...
Con todos gritando / vamos a desgarrar a través de tu cerebro / tenemos el poder letal / te está causando dulce dolor...

miércoles, 20 de enero de 2010

Un día de Barbie

Acababa de llegar a su casa y estaba cansada. Todavía seguía sin entender por qué la gente la miraba por sobre el hombro y hacía acotaciones del estilo: "Vos que no hacés nada...".
Su día había comenzado a las nueve de la mañana (era necesario dormir ocho horas diarias). Por eso cuando se despertó a las siete y notó que el despertador no había sonado, se quedó con los ojos cerrados tratando de volver a dormirse. Como no pudo conciliar el sueño, se hizo la que dormía; así cumplió la cantidad reglamentaria.
Después se levantó, se duchó, se aplicó todas las cremas habituales y se roció con su body lotion. A las diez tenía que estar en el gym para su rutina matutina, donde ocupaba su mente en contar el número de series que iba haciendo. Salió a las doce después de un baño refrescante. Almorzó en el restaurante vegetariano, que ofrecían esos espárragos que a duras penas podía tragar, sin mucha sal y con una gota de aceite y mucha, mucha agua. Mientras comía, aprovechó para hojear las revistas de moda y enterarse de las noticias.
A la una tenía hora en el spa. Primero el baño de barro, después la limpieza de cutis con un peeling, luego sesiones de electroshock (perdón, electrodos, aunque lo otro quizás le hubiese venido bien junto con una cura de sueño y los enemas que se hacía cada tanto para limpiar su interior físico y espiritual), masajes descontracturantes y piedras calientes. Durante ese tiempo, se relajó y dejó que su mente fluyera libre.
Al terminar salió raudamente hacia su clase de baile; ayer había sido salsa, hoy tocaba tango. Bailó y se divirtió con frescura, siempre pendiente de los pasos que tenía que dar. Por último, en el camino a la peluquería, se compró su body lotion que ya se le había terminado. Su peluquero le brushinó el cabello con un movimiento natural; por suerte no tuvo que teñirse, no le daban los tiempos; la maquillaron y le hicieron las manos.
Ahora eran las nueve de la noche y no sabía qué hacía ahí sentada. Cuando Ken vino a buscarla, ya estaba fabulosamente cambiada. A la fiesta de beneficencia llegaron a las diez. La recibió una mujer vestida con un Donna Karan, que la tuvo quince minutos hablando sobre el compromiso social y el desarrollo sostenible, mientras ella inclinaba la cabeza hacia un lado y le sonreía comprensivamente.

domingo, 10 de enero de 2010

En confesión

El sábado salí a caminar. Eran las diez de la mañana. Habré tardado una hora y pico. No me di cuenta de que el sol estaba muy fuerte. De repente a la tarde mi hermana me mira y me dice: "¡Tenés el pecho rojo!" Cuando me veo al espejo, pude constatar que era bestialmente cierto y me asusté, como nunca me asusté en estos años. En general, me encanta notar un poco de color en mi cara. Pero esta vez no era un leve tono... y recordé.
Hace más de diez años me comentaron que una persona, cuando se enteró, dijo algo así: "Va a estar todo bien. Virna, tiene un carácter especial." En realidad, no sé cuáles fueron sus palabras, pero sí la idea. Y esa persona con la cual me había cruzado determinadas veces me sorprendió con su conocimiento sobre mí y me marcó. Es cierto, sobrellevé el tema sin pensarlo demasiado y sin consecuencias posteriores a la operación.
Ahora estoy acá sin tomar conciencia de lo que tengo que agradecer. Día tras día conozco personas que luchan contra el cáncer poniendo todas sus garras para finalmente ser vencidas por la enfermedad y yo jugando a ser inmortal. Finalmente, tuve miedo.
Ahí me percaté de que suelo mostrar una imagen fuerte. ¿Cuántas veces comentarios o actitudes de otros me dolieron de distintas maneras y mi reacción fue mantenerme imperturbable? Las veces que me lastimaron no lo demostré y así se fue generando esta coraza, al punto de que ni yo misma me permito sentirme afectada, pero todo queda dentro de este cuerpo, que no quiere mostrarse débil y que contiene una nena necesitada de mimos y atención.

viernes, 8 de enero de 2010

Bastet no espera

Estaba sentada en su palacio, donde gatos de todo tipo y pelaje retozaban, jugaban o solamente corrían; parecía que había un ejemplar de cada felino que hubiese existido. Mientras los contemplaba sonriente, con una sonrisa a media asta, pensó que ya era tiempo de levantar sus velos que se deslizaban sobre el diván.
Se miró al espejo y su imagen reflejada le gustó. Tan sólo al pensar que los rayos de sol alcanzarían su piel sintió un cosquilleo que le iba ardiendo desde el fondo de su entraña. No pudo contener sus movimientos y se restregó como un minino; así salió a la calle, totalmente enhiesta.

miércoles, 6 de enero de 2010

La alegría es la suma de grandes placeres

Hoy es un comentario fuera del estilo del blog. Quizás pueda generar algo más tarde. Por el momento sólo puedo decir que mi gato, rey mago, me ha regalo la entrada.
Los que me conocen saben lo que es; es toda una historia.

martes, 5 de enero de 2010

Tres estrellas en el camino

Hoy es la noche en que los sueños se personifican en seres humanos. Son reyes que dejaron sus reinos para andar en el desierto sobre sus camellos cansinos. Soportaron el frío y las tormentas de arena. Querían llegar a una meta solamente guiados por una luz en la oscuridad. Sabían que marcaba la existencia de un ser especial y no quisieron quedarse sentados contemplándola desde sus tronos.
Ataviados con sus atuendos, llegaron al pesebre, donde te encontraron dormida. Presentiste su presencia en medio de la agitación del sueño. Tu rostro se relajó cuando recibiste el beso que deslizaron en tu mejilla. Mañana... mañana es un día mágico.

lunes, 4 de enero de 2010

El guerrero azul

Lo había soñado cada noche durante un año. Conocía todos los detalles de su cuerpo, pero nunca adivinó su vestimenta. A pesar de la bruma, podía captar la armadura azul que lo envolvía para protegerlo de las filosas espadas, que como espinas horadarían su piel.
Era un guerrero, exactamente como ella. Por eso ninguno de los dos estaba dispuesto a ceder; lo vio en su mirada, y por sus gestos comprendió que se sentía al descubierto; el enfrentamiento era inminente.
Mientras se acercaba, supo que sus brazos no iban a poder contener el ataque y que en algún momento tendría que enterrar su daga roja en la tierra.