Sólo nada el nadador, porque nunca nada el suicida.
Sol o nada es su elección en el océano de seres.
O sea, no quiere ser ese que es.

miércoles, 29 de octubre de 2008

Una noticia más


Las chicas estaban nerviosas, porque tenían la prueba de fin de año. Algunas tenían un cansancio mortal, porque habían estudiado toda la noche. Otras estaban absortas en su propia estética que habían expuesto en la fiesta de la noche anterior. Se habían divertido a mil.

Sin embargo, ninguna se percató de la ausencia de Yanina. No era normal que faltara al colegio, pero era lógico o posible que después de una fiesta como la de anoche no viniera. La habían visto tomando un trago de color azul, un vaso tras otro. También la habían visto riéndose a las carcajadas con un grupo de chicos. Pudieron verla bailar desenfrenadamente. Pero después ya ninguna podía siquiera acordarse de lo que había hecho cada una.

Mientras sus amigas estaban aburridas escuchando la clase de arte, el cuerpo de Yanina se encontraba semidesnudo sobre el piso de una casa abandonada y destruida. El artículo del diario era escueto: "Fue encontrado el cuerpo de la adolescente desaparecida con signos de haber sido violada reiteradamente".

1 comentario:

Sole dijo...

Dios!!! Esto, más los otros dos cuentos que leí... ahora entiendo por qué "olas sangrantes"... igual me encanta tu visión del mundo, comparto totalmente...